Ebrard se lavó las manos frente a desplome de L12 del metro

Cuatro Q

Cuatro Q

Información & Análisis

Por: Juan Chávez

Con eufemismos, Marcelo Ebrard pretende lavarse las manos en el desplome de la Línea 12 del Metro que colapsó el pasado 3 de mayo ocasionando la muerte de 26 personas y casi un centenar de heridos.

“Yo cumplí con mi deber en ese momento; es lo que tenía que hacer”, respondió el secretario de Relaciones Exteriores cuestionado la mañana de este martes sobre cómo se siente en referencia a la construcción de la que él bautizó como la Línea Dorada, y que luego de haber sido muy discutida, le dio por auto exiliarse en París durante dos años.

Si hubiera cumplido con su deber, esa maldita línea del Metro hubiera funcionado bien desde que Ebrard la inauguró con bombo y platillos en diciembre de 2012.

Desparpajado y cínicamente, añadió:

“Yo hice lo que tenía que hacer si no, no estaría aquí; no podría yo dar la cara. Actué profesional y de una manera íntegra”, aseguró en la conferencia mañanera del presidente.

El exjefe de Gobierno de la Ciudad de México dijo que difícilmente pudo haber supervisado la falta de pernos, que de acuerdo con las investigaciones es lo que produjo el colapso.

Su cinismo fue más allá. Dijo que apenas la semana pasada se enteró “que no se pusieron los pernos o que estaba mal una soldadura”

“Yo creo que (para) el jefe de Gobierno es muy difícil que pueda supervisar eso personalmente. Para eso se creó un organismo muy grande que se llamó Proyecto Metro, que tenía autonomía técnica y financiera e intervino en consorcio con muchísimas empresas. Y el encargado de la supervisión de la obra fue el Premio Nacional de Ingeniería Interina del Instituto de Ingeniería de la UNAM, en ese tramo”, dijo.

En relación con las investigaciones de la Fiscalía General de Justicia capitalina sobre el caso, que imputan como responsables del colapso a diez exfuncionarios de su gabinete, entre ellos Enrique Horcasitas, exdirector de Diseño y Obras Civiles del Proyecto Metro, por los delitos de homicidio y lesiones culposas y daños a la propiedad, recordó que algunos de ellos ya fueron procesados y ganaron los juicios en su contra en los tiempos de Mancera.

Lo que habría que recordarle a Ebrard es que no hay segundas manos malas y que él, como jefe de Gobierno, autorizó los planes de construcción de la Línea 12 y si no supervisó el avance de la obra cometió el delito de omisión.

Sobre todo: ¿Por qué se mantuvo en su auto exilio?

Hay, de otra parte, la posición de Carlos Slim de asumir los costos de la reconstrucción del tramo colapsado de la Línea 12 y recordar, de nueva cuenta, que confesión de parte significa, en el derecho penal, relevo de pruebas.

Es claro entonces que la justicia, la verdadera justicia, no se está ejerciendo en la lamentable tragedia del 3 de mayo y que el hilo se ha reventado por lo más delgado culpando a exfuncionarios de segundo nivel.

De ellos, encabezados por Horcasitas, han recaído las carpetas de investigación y pronto habrán de ser remitidos a un juez de control que decidirá sobre lo que pasa durante las etapas previas del proceso y cuidará que se respeten los derechos tanto de las víctimas (en el caso las indemnizaciones a las familias de los 26 muertos), como de los imputados.

 45 Vistas totales,  1 Vistas de hoy

Compartir:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Compartir: