Por: Juan Chávez
Con las elecciones del 6 de junio al otro lado de la puerta, Manuel Bartlett y el narcotraficante prófugo Rafael Caro Quintero si pusieran un pie en Estados Unidos, los dos serían detenidos de inmediato por la justicia de ese país-
A Bartlett, que los protegidos en juicios contra narcotraficantes no dejan de mencionarlo por el caso del asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena, lo tiene la 4T de López Obrador, como director de la Comisión Federal de Electricidad.
Fragmentos de un expediente oficial del caso de Enrique Camarena –agente de la DEA secuestrado, torturado y asesinado en febrero de 1985– recogen lo dicho por testigos protegidos que señalan a Manuel Bartlett Díaz, secretario de Gobernación en aquel momento y actual director de la CFE, como participante en reuniones con narcos antes y después de que dicho crimen se llevara a cabo.
“El señor Bartlett sabe que su nombre ha sido mencionado durante las décadas que lleva esta investigación en curso del caso Camarena y por eso tendría que declarar ante un Gran Jurado”, agrega un funcionario del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Camarena, agente de la Administración Antidrogas (DEA) de Estados Unidos, fue secuestrado el 7 de febrero de 1985 en Guadalajara, y asesinado dos días después por pistoleros y ex policías judiciales del estado bajo las órdenes de un grupo de narcotraficantes encabezados por Miguel Ángel Félix Gallardo, Ernesto Fonseca Carrillo y Rafael Caro Quintero, quienes a su vez se encontraban presuntamente coludidos con autoridades federales y estatales, como se ha publicado.
Los funcionarios del Departamento de Justicia –quienes por tratarse de una investigación en curso piden el anonimato–, dicen que varios “testigos protegidos” que llevan años colaborando en el caso han insistido en mencionar a Bartlett.
“(Bartlett Díaz) tendría que hacer muchas aclaraciones sobre por qué diferentes testigos que, incluso entre ellos no se conocen, insisten en involucrarlo en el caso del secuestro, tortura y asesinato de Camarena”, sostiene el funcionario entrevistado que participa en la reapertura del expediente, tras 35 años de haber sido torturado y asesinado Enrique Camarena.
Los documentos del caso mencionan al actual director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como participante en reuniones con narcos y funcionaros antes del secuestro y después del asesinato de Camarena.
López Obrador debe tener pendiente una gran factura con Bartlett, a quien sostiene en la CFE y por quien ha abogado siempre que se le cuestiona sobre la razón de mantener al hombre al que se le cayó el sistema en 1988, como secretario de Gobernación y responsable de las elecciones presidenciales de ese año, en el organismo estatal de electricidad.
Bartlett, con esa “caída del sistema” cocinó el triunfo electoral para que Carlos Salinas de Gortari fuera declarado Presidente de la República para el sexenio 1988-1994. Las elecciones fueron ganadas en realidad por Cuauhtémoc Cárdenas y el Maquío del PAN, que quedó tercero, armó la tremolina para impulsar a Cárdenas… pero eso le costó la vida. Meses después, en 1989, un “choque con un tráiler” en Sinaloa, lo silenció para siempre.